Es solo una mamada
Mi nombre es Javier, tengo cuarenta y dos años y estoy felizmente casado con una mujer maravillosa. De camino a casa desde el trabajo hace unos días, me detuve en…
Donde el deseo se convierte en palabras
Mi nombre es Javier, tengo cuarenta y dos años y estoy felizmente casado con una mujer maravillosa. De camino a casa desde el trabajo hace unos días, me detuve en…